Marcela Ramírez-Pasillas es Profesora-Investigadora en Jönköping International Business School. En su visita al Instituto de Familias Empresarias del Tec de Monterrey charló para LEGADO Live sobre el papel que desempeña la teoría de prácticas y la observación dentro del funcionamiento de la empresa.
En el mundo del emprendimiento de familias empresarias, la ciencia se ha convertido en un aliado indispensable para visibilizar las prácticas invisibles de las dinámicas internas de estas familias. Los métodos de investigación científica aportan rigor y estructura, y ofrecen una lente precisa para vislumbrar lo que podría pasar desapercibido: las complejas interacciones, prácticas arraigadas y diálogos del alma de estos emprendimientos familiares. La teoría de prácticas y la observación ofrecen resultados que trascienden el ámbito de la investigación. Estas se han convertido en herramientas útiles para las familias empresarias porque facilitan el impulso hacia la innovación y el emprendimiento.
La investigación de Marcela Ramírez-Pasillas se distingue por su enfoque en la teoría de prácticas, una perspectiva que está comenzando a ser utilizada en el estudio de familias empresarias, pero que cuenta con gran potencial de aportar aprendizajes y resultados significativos. Este enfoque la ha llevado a descubrir que cada familia tiene un universo de prácticas únicas; cada una tiene sus rituales y combinaciones de decisiones que definen su camino hacia el éxito o el fracaso. Factores como la composición heterogénea de la familia, el número de integrantes, el nivel de involucramiento y las dinámicas intergeneracionales generan muchas combinaciones de prácticas para cada familia; sin embargo, Marcela reconoce que aún queda mucho por investigar y aprender sobre estas dinámicas.
Con la ayuda de la teoría de prácticas, según la investigadora, sería interesante explorar cuál es esa combinación de prácticas que conduce el éxito del emprendimiento familiar. Al hacerla visible sería posible generar conocimiento para las próximas generaciones o incluso para otras familias, al proporcionarles herramientas e ir actualizando la manera en la que emprenden.
La observación es también una herramienta clave para comprender la esencia de estas prácticas; esta nos permite sumergirnos en el día a día de la familia empresaria, captar sutilezas en el comportamiento, el lenguaje y las interacciones que, de otro modo, podrían pasar desapercibidas; cada detalle revela pistas sobre el funcionamiento interno y las dinámicas familiares.
La observación se vuelve crucial en las familias empresarias cuando consideramos cómo desde niños sus integrantes viven este proceso. Lo que comienza como juegos, se convierte en una valiosa lección sobre cómo se llevan a cabo las operaciones dentro de la empresa. Esta transferencia de conocimiento, arraigada en la observación y el aprendizaje situado, es fundamental para el crecimiento y la evolución de los emprendimientos familiares a lo largo del tiempo.
A medida que las generaciones que solían jugar de niños en la empresa crecen y adquieren educación externa –a través de una carrera profesional o trabajando fuera de la empresa familiar– surge la innovación. Las nuevas generaciones regresan con nuevas herramientas y perspectivas que invitan a innovar y enriquecer las prácticas y rutinas actuales dentro de sus familias. Por ejemplo, cuestionar las políticas estrictas que antes se consideraban inamovibles, proponer normas de emprendimiento, integrar a los familiares políticos en la toma de decisiones empresariales o, incluso, impulsar la innovación del modelo de negocio para adaptarse a un mercado cambiante. Estas propuestas provenientes de las generaciones más jóvenes –que antes solían observar– representan formas de emprendimiento dentro de la familia a través de la implementación de cambios en sus prácticas.
Mediante la observación, la investigación y el análisis, es posible hacer visible lo invisible, arrojando luz sobre las prácticas que sustentan el éxito de estas familias emprendedoras e impulsando la innovación continua. La comprensión profunda de las prácticas internas permite a las familias anticipar desafíos, identificar oportunidades y mantenerse ágiles frente a los cambios del mercado y las demandas de la industria. La integración de la ciencia al arte de emprender no solo enriquece las investigaciones, sino que también ofrece herramientas prácticas para el éxito empresarial sostenible a lo largo del tiempo.
Disfruta del episodio en el que fue basado este artículo:
SOBRE LA AUTORA
Dania Fernández es Asistente de Investigación y Creación de Contenidos del Instituto de Familias Empresarias para México y LATAM del Tecnológico de Monterrey.
Tal vez te puede interesar: